Ya comentamos en otro artículo, la importancia de la inteligencia emocional. En este sentido, hemos encontrado un artículo en la revista digital de la universidad de padres on-line donde nos dice literalmente: El amor compartido engrendra amor, se proyecta en los hijos y refuerza el vínculo y la confianza básica entre todos sus miembros. Es una fortaleza clave para hacer frente a los múltiples e inevitables avatares de la vida y para mantener con más garantía de éxito el proceso educativo de los hijos. La sencilla ecuación de este título es básicamente cierta, viene avalada por la experiencia de muchas familias y por otros muchos datos. Las relaciones de pareja y los lazos familiares son el resultado de un proceso de interacción amorosa entre sus miembros. De la calidad de los lazos amorosos dependerá, en gran parte, el bienestar de la familia. (Lo que no implica que las familias monoparentales o reconstituidas no puedan también e igualmente ser felices). Para leer más sobre este tema, PINCHA AQUÍ