Cuando una pareja se entera que van a ser padres, les inundan una multitud de sentimientos encontrados, por una parte está la emoción y la felicidad que les produce saber que en nueve meses van a tener un pequeño. Pero a su vez, aparecen también la inseguridad y la preocupación de como serán como padres, si serán capaces de criar y educar a su hijo correctamente. Comienzan a observar a todos los niños que les rodean y a decidir que "si" y que "no" van a hacer cuando llegue su bebé.
Todos los padres se han enfrentado a estas dudas.
Han creado este decálogo para que tengáis por donde empezar a la hora de afrontar su educación, para encaminaros un poquito en la magnifica tarea que tenéis por venir.
1. Es un error bastante común el creer que el cuidado del bebé es sólo físico, baño, lactancia, sueño,... No vamos ha decir que todo esto no sea importante, es vital para que el bebé este feliz. Pero por muy pequeñito e indefenso que os parezca, desde el momento que ve la luz tú bebé esta aprendiendo, por lo que aunque te parezca mentira deberás empezar a ser padre y a educar al pequeño desde ese mismo instante, sin agobios, con tiempo, pero si es conveniente que a lo largo de los nueve meses os sentéis tu pareja y tú a planificar que tipo de padres queréis ser.
2. El ser padre es el único Master en el que te hacen director de proyecto sin haber pasado por una sola práctica. Pero no tengas miedo, la naturaleza es muy consciente de esta situación y sabe que tanto a tu cachorrito como a ti os han doctorado el mismo día, por lo que te provee de un instinto de protección tan fuerte que el pequeño estará perfectamente atendido. Confía en ti mismo.
3. No pretendas tenerlo todo previsto en cuanto a su educación. Hay una serie de pautas genéricas que si son importantes conocer, pero lo que tienes entre manos es una persona, aunque te parezca increíble independiente de ti. Que desde el día que nace trae su carácter, sus rasgos, sus habilidades,... No existen estándares, un niño no es una formula matemática, desde el primer día deberéis ir conociendo y respetando a vuestro hijo poco a poco, para fomentar sus mejores cualidades y ayudarle a superar en las que no sea tan bueno.
4. Hay un sabio refrán que dice: "Es mejor prevenir que curar". Pues bien, en todo lo referente a la educación de un niño este refrán cobra el doble de fuerza. Casi todos lo padres nos esforzamos en que un pequeño de 2 o 3 años pida por favor y de las gracias cuando alguien le da un caramelo. Y sin embargo nos quedamos tan anchos cuando un niño de 8 o 9 años nos manda a freír espárragos, cuando le acabamos de comprar un helado que no es del sabor que él nos había pedido. Esto no es saber educar. La educación es un proyecto a largo plazo. Aunque debamos empezar el primer día hay que continuar, sin perder el entusiasmo, a lo largo de muchas y muy diversas etapas por las que el niño irá pasando y en las que deberemos ir pidiéndole que se adapte a las nuevas normas que por su edad le tocará cumplir.5. Aprender a ser críticos. Cuando llega nuestro bebé, todo nuestro entorno comienza a darnos consejos sobre como abrigarle, como bañarle, .... ¡OJO! En el cuidado de un bebé hay que hacer caso por encima de todo al pediatra, al que habremos seleccionado previamente. Que no te importe hacer una lista interminable de preguntas sobre todos y cada uno de los aspectos que te preocupen de tu pequeño. Acostúmbrate a explicar muy educadamente en público que solo seguís los consejos de vuestro médico.
6. Coherencia ante todo. Ambos padres deberéis tener muy claro que tipo de educación queréis para vuestro pequeño. Esta SI es una norma de educación importantísima, no hay cosa que más descentre a un niño que ver falta de consistencia en las decisiones de sus padres, NUNCA os podréis contradecir el uno al otro y NUNCA deberéis discutir una norma delante de vuestro hijo. Se producirán muchas situaciones inevitables con abuelos, tíos, amigos, ... Hablad entre vosotros acordad como solucionarlas, siempre que sus padres sigan una misma línea de educación , entenderá perfectamente que esos momentos tan divertidos son ocasionales, no forman parte de su vida cotidiana.
7. Desde el principio os convertiréis en sus modelos. Es una responsabilidad importante que deberéis asumir, ya que no es serio pedirle a vuestro hijo que cumpla unas normas que vosotros os saltáis constantemente como por ejemplo, decirle a gritos que deje de chillar. Esta es la mejor clave para su educación, ya que él observa todo lo que sucede a su al rededor y aprende de ello, sin daros cuenta estaréis educando de la mejor manera posible, ya que es mucho más eficaz aprender de los actos que de las palabras.
8. Permitidle crecer. No queráis correr, es muy habitual que los padres pensemos que nuestros niños son superdotados, cuando comienzan ha hacer cosas que no nos esperábamos. Es posible que lo sean, pero dadles la opción de ser niños normales y corrientes. Dejadles que vayan cumpliendo etapas, no les compréis juguetes superiores a su edad (otro error bastante común). No sirve de nada salvo para hacerle un lío al pequeño.
9. Ante todo positivismo. Aplaudid cada uno de sus pequeños logros, hacedle saber constantemente lo mucho que le queréis, no os canséis de darle besos, achuchones y caricias. Poneros en su lugar y hacedle sentir como la persona más importante de este mundo.
10. Disfrutad de este momento. Es lo más importante que vais ha hacer en la vida, no permitáis que la preocupación por hacerlo bien os nuble disfrutar de ver crecer a vuestro cachorro. No pasa nada por equivocarse, no hay que ser padres perfectos, en educación casi todo se puede corregir con el tiempo. Poned todo vuestro cariño y esfuerzo, un niño criado con atención, responsabilidad y mucho, mucho cariño se convertirá en una gran persona.
Todos los padres se han enfrentado a estas dudas.
Han creado este decálogo para que tengáis por donde empezar a la hora de afrontar su educación, para encaminaros un poquito en la magnifica tarea que tenéis por venir.
1. Es un error bastante común el creer que el cuidado del bebé es sólo físico, baño, lactancia, sueño,... No vamos ha decir que todo esto no sea importante, es vital para que el bebé este feliz. Pero por muy pequeñito e indefenso que os parezca, desde el momento que ve la luz tú bebé esta aprendiendo, por lo que aunque te parezca mentira deberás empezar a ser padre y a educar al pequeño desde ese mismo instante, sin agobios, con tiempo, pero si es conveniente que a lo largo de los nueve meses os sentéis tu pareja y tú a planificar que tipo de padres queréis ser.
2. El ser padre es el único Master en el que te hacen director de proyecto sin haber pasado por una sola práctica. Pero no tengas miedo, la naturaleza es muy consciente de esta situación y sabe que tanto a tu cachorrito como a ti os han doctorado el mismo día, por lo que te provee de un instinto de protección tan fuerte que el pequeño estará perfectamente atendido. Confía en ti mismo.
3. No pretendas tenerlo todo previsto en cuanto a su educación. Hay una serie de pautas genéricas que si son importantes conocer, pero lo que tienes entre manos es una persona, aunque te parezca increíble independiente de ti. Que desde el día que nace trae su carácter, sus rasgos, sus habilidades,... No existen estándares, un niño no es una formula matemática, desde el primer día deberéis ir conociendo y respetando a vuestro hijo poco a poco, para fomentar sus mejores cualidades y ayudarle a superar en las que no sea tan bueno.
4. Hay un sabio refrán que dice: "Es mejor prevenir que curar". Pues bien, en todo lo referente a la educación de un niño este refrán cobra el doble de fuerza. Casi todos lo padres nos esforzamos en que un pequeño de 2 o 3 años pida por favor y de las gracias cuando alguien le da un caramelo. Y sin embargo nos quedamos tan anchos cuando un niño de 8 o 9 años nos manda a freír espárragos, cuando le acabamos de comprar un helado que no es del sabor que él nos había pedido. Esto no es saber educar. La educación es un proyecto a largo plazo. Aunque debamos empezar el primer día hay que continuar, sin perder el entusiasmo, a lo largo de muchas y muy diversas etapas por las que el niño irá pasando y en las que deberemos ir pidiéndole que se adapte a las nuevas normas que por su edad le tocará cumplir.5. Aprender a ser críticos. Cuando llega nuestro bebé, todo nuestro entorno comienza a darnos consejos sobre como abrigarle, como bañarle, .... ¡OJO! En el cuidado de un bebé hay que hacer caso por encima de todo al pediatra, al que habremos seleccionado previamente. Que no te importe hacer una lista interminable de preguntas sobre todos y cada uno de los aspectos que te preocupen de tu pequeño. Acostúmbrate a explicar muy educadamente en público que solo seguís los consejos de vuestro médico.
6. Coherencia ante todo. Ambos padres deberéis tener muy claro que tipo de educación queréis para vuestro pequeño. Esta SI es una norma de educación importantísima, no hay cosa que más descentre a un niño que ver falta de consistencia en las decisiones de sus padres, NUNCA os podréis contradecir el uno al otro y NUNCA deberéis discutir una norma delante de vuestro hijo. Se producirán muchas situaciones inevitables con abuelos, tíos, amigos, ... Hablad entre vosotros acordad como solucionarlas, siempre que sus padres sigan una misma línea de educación , entenderá perfectamente que esos momentos tan divertidos son ocasionales, no forman parte de su vida cotidiana.
7. Desde el principio os convertiréis en sus modelos. Es una responsabilidad importante que deberéis asumir, ya que no es serio pedirle a vuestro hijo que cumpla unas normas que vosotros os saltáis constantemente como por ejemplo, decirle a gritos que deje de chillar. Esta es la mejor clave para su educación, ya que él observa todo lo que sucede a su al rededor y aprende de ello, sin daros cuenta estaréis educando de la mejor manera posible, ya que es mucho más eficaz aprender de los actos que de las palabras.
8. Permitidle crecer. No queráis correr, es muy habitual que los padres pensemos que nuestros niños son superdotados, cuando comienzan ha hacer cosas que no nos esperábamos. Es posible que lo sean, pero dadles la opción de ser niños normales y corrientes. Dejadles que vayan cumpliendo etapas, no les compréis juguetes superiores a su edad (otro error bastante común). No sirve de nada salvo para hacerle un lío al pequeño.
9. Ante todo positivismo. Aplaudid cada uno de sus pequeños logros, hacedle saber constantemente lo mucho que le queréis, no os canséis de darle besos, achuchones y caricias. Poneros en su lugar y hacedle sentir como la persona más importante de este mundo.
10. Disfrutad de este momento. Es lo más importante que vais ha hacer en la vida, no permitáis que la preocupación por hacerlo bien os nuble disfrutar de ver crecer a vuestro cachorro. No pasa nada por equivocarse, no hay que ser padres perfectos, en educación casi todo se puede corregir con el tiempo. Poned todo vuestro cariño y esfuerzo, un niño criado con atención, responsabilidad y mucho, mucho cariño se convertirá en una gran persona.